domingo, 27 de marzo de 2016

Charlatanes, buhoneros y comerciantes de elixires milagrosos.

Pintona Pinturera, a la caza de fauna mosquera.
Charlatanes, buhoneros y comerciantes de elixires milagrosos.


Reviso mi colección de cañas de mosca, arrancadas de las manos de los incautos pescadores que quisieron darme caza. Inocentes pescadores de seca y ninfa, inocentes por creer que no les podría expulsar mi urea en sus rostros barbudos, quedándome con sus preciados tesoros con garantía “de por vida”.

¿Quizás doble inocentes? mejor babayos, bucéfalos y mastuerzos… ¡triple inocentes!, van a sacarme fuera del agua ¿a mí?, van a vencerme por poner un terminal grueso, ¿a mí?, ¿cañas con garantía de por vida?, permitidme una enorme y reverberada carcajada.

Sigo llorando de la risa al ver que continuamente los mosqueros siguen picando ante las burdas y simples técnicas de venta con engaño y alevosía, elixires que curan el dolor de boca, cabeza y alma, alejando además el mal de ojo.

Cañas con garantía dicen muchos, de por vida, de dos años, de cinco; en caso de rotura de cualquier tramo deberá ponerse en contacto mediante correo electrónico o formulario “x” justificando que la rotura ha sido en acción de pesca, adjuntando el tramo roto y por los euros que suele valer un tramo de tu caña, te lo reponen sin miramientos.  ¿Acaso no estaba ya pagado?

Carretes en polialeaciones con mucho titanio, aluminio o duridio, mucho diseño, mil agujeros y brillos, a los que cual urraca deslumbrada, los torpes mosqueros adquieren con garantías perpetuas para tener que tirarlos al año por oxidación de piezas inoxidables. Estúpidos compradores de diseño americano y europeo fabricado en paraísos de la mediocridad y explotación consentida, revendidos varias veces de unos a otros aumentando su valor hasta volver a pagar “lagarantía”.

Veo desde mi hogar azul algunos catálogos, mailings, campañas y propaganda barata en perfiles de Facebook donde palurdos disfrazados de inteligentes dan “me gusta” a engañifas enmascaradas y palmean un mercadeo del embuste permanente, donde simplemente los charlatanes de la red sobreviven con la picardía remando a su favor.

Esas extrañas prendas que se ponen para entrar en el río adquiridas a precio desorbitado, costuras termo selladas y 18 capas, con entrada de agua garantizada en un porcentaje muy alto de los casos, achacando a las deformidades humanas o el mal uso el motivo de la no garantía ya pagada.

Postventa llaman al discurso fariseo y al trilerismo donde los ganchos son los mismos estafados; percebes y zopencos humanos autofidelizados a base de creer discursos repetidos hasta la saciedad y tipificados en cualquier manual o curso de ventas.

Creadores de bandos y guerras civiles económicas que despistan, donde los cursos y exhibiciones gratuitos de cualquier tipo envuelven más y más a los memos uniformados de goretex, en un entorno ultramercantil consentido.

Humanos bodoques y borregos; que orgulloso estoy de ser un pez, muy inteligente por cierto y a la par crítico con quien aún no ha sido capaz de engañarme. En mi sabiduría extrema hablo de charlatanes, buhoneros y comerciantes de elixires milagrosos, no de decentes tenderos; sería arrogante por mi parte pensar que todos son iguales.

La Pintona Pinturera

domingo, 20 de marzo de 2016

Usos sociales jerárquicos en los faltos y la pesca a mosca

Retomamos y continuamos con nuestra serie de artículos de divulgación antropológico-social abordando en este caso, las estructuras jerárquicas que se establecen en la estratificación social de los pescadores a mosca. Tomaremos como referencia las investigaciones del Prof. Ulpiano Zangüango(1936-* ) del Dpto. de Antropología Social de la Universidad de Portmount South-West Manchuela.

Foto: 1986, el profesor Zangüango en una clase magistral en la Facultad de Bioquímica de la Universidad de Wëstenfallen South Belmontejo sobre  los usos etnobotánicosancestrales en los pueblos de la Mancha y la fabricación de resolí.


El profesor Zangüango se especializó en Antropología Física en la Universidad de Westfällensteinfen, siendo su mentor el conocido investigador Prof. Dr. Walter R. Hölddirggonther(1907-1998) (alumno a su vez de Malinowski y que había dedicado su vida al estudio de la roña del ombligo de los trobianddeses y su relación con la roña de los intersticios de los dedos de los pies y que dio lugar a su obra cumbre “La roña del ombligo en los trobiandeses: origen, consistencia y relación con la roña de los intersticios de  los dedos de los pies” (1949). En esta obra se lanzaron las preguntas claves sobre este importante asunto y que aún están en debate en el conjunto de la comunidad científica, a saber: “¿Es la roña del ombligo la misma que la de los dedos de los pies?, ¿la roña del ombligo viaja hacia los pies, o es la de los pies la que viaja al ombligo?, ¿es la esferificación de las pelotillas una estructura derivada del trabajo social o es producto de la labor individual de los sujetos lógico-operatorios que la portan”. Pag.34 y s. Op.Ct.).

Foto: 1947, el profesor Westfällensteinfenen en los prolegómenos de una extracción de roña de los dedos de los pies con un grupo de trobiandeses.

Obtenido su doctorado en la Universidad de Westfällensteinfen obtuvo la plaza de profesor titular en el del Dpto. de Antropología social de la Universidad de Portmount South-West Manchuela, que ocupa actualmente. Junto a prestigiosos colaboradores como la Profesora Jacinta de Lomo ha llevado adelante la investigación en varios campos de la antropología social (algunos de ellos citados anteriormente en este mismo lugar, como “Los Nuer y las voluptuosidad de las mentes circulares” y otros menos conocidos, pero no por ello menos importantes, como “Las vaporosidades y los encapsulamientos en los señuelos de pesca del Tonto de Toronto y su relación con el espacio curvo no euclideano de Lobachevski” (La Manchuela 1998)- no confundir a éste último con el importante catador de ajos de Las Pedroñeras, Igor Kachostky-).

Sin embargo, lo que hoy nos ocupa es el estudio pormenorizado que el Profesor Zangüango  presentó en su, ya clásico, texto “Los pescadores a mosca y las relaciones de poder entre sujetos lógico-operatorios en el eje circular del campo antropológico: tipología de los faltos” (Membrilla, 2001) y en el que se abordan las estructuras jerárquicas que se establecen en la estratificación social de los pescadoresa mosca conforme a su desarrollo cognitivo.

La clasificación propuesta por el profesor Zangüango en su obra para el espacio circular antropológico se desarrolla conforme a la ley que determinan las relaciones diaméricas entre los individuos que lo conforman, triturando las relaciones distributivas metaméricas entre los sujetos lógico-operatorios, o en palabras del profesor Zangüango: “No hay falto que no se encuentre con otro que le haga la rosca” (pag.32 Op.ct.).
Toda vez determinada la ley que estructura las relaciones jerárquicas entre los faltos y que hemos citado, el Profesor Zangüango pasa a establecer la taxonomía de los faltos conforme a la tipología marco instaurada por la escuela de Hilërgffturgnem conforme a la metodología de la corriente de la Universidad deMinglanilla, a saber:

-    El falto entero (morpha genérica): Es el falto común, el simple, el que sin dos dedos de frente sigue al rebaño aplaudiendo lo que el sujeto lógico-operatioalpha cuelga en redes sociales. Como ejemplo podemos encontrar los especímenes que sin entender un carajo de lo expuesto por el sujeto alpha le hacen la rosca esperando su aprobación o alguna palabra de reconocimiento “por la gran amistad que les une”. Se trata del grupo más bajo en el estrato jerárquico de los faltos. Pueden ser empalagosos, pesaos, indigestos, más agobiantes que DarkVader con un megáfono y más pesaos que un collar de melones de Villaconejos. Son muy dados a las comilonas y a reunirse para escuchar al sujeto alpha en quedadas cerca de los ríos y montañas.
Foto: falto entero dispuesto a terminar una comilona, echando unos cubatas. Nótese el uso de gafas polarizadas (sin ahumar), el último modelo de chaleco minimalista de la última colección de Orvi, y la caña metida en la faltriqueira conforme a lo descrito por el profesor Zangüango en su obra “Usos y costumbres de los faltos enteros: la importancia de las comilonas y los cubatas” (1999).

-    El faltejo: Según la descripción del del Profesor Zangüango, se trata “del proyecto de falto”. Su característica más definitoria es su candidez, su falta de sentido crítico y su acercamiento al sujeto lógico-operatorio alpha a modo de escudero, como lacayo ingenuo que espera encontrar “la sabiduría mosquera” desde la perspectiva émic del que se ha sentido elegido por una fuerza superior. Si bien su rango en la estratificación social está por encima del falto entero, su ingenuidad sitúa su percepción cognitiva al nivel del Tonto de Toronto, o del mismísimo Nota de Minessota (ver artículo sobre estos mismo especímenes en este blog). Suele dar gracias hasta la arcada por los dones y sabiduría recibida por el sujeto lógico-operatorio alpha y repiten hasta la saciedad “lo mucho que le deben a su mentor”. Es denominado por algunos estudiosos de la antropología social adscritos a la escuela de Dhöringwenhen, como “el proyecto de medio falto”.

Foto: cachorro de faltejo en sus primeros estadios de desarrollo. El profesor Zangüango documentó el proceso de crecimiento y desarrollo cognitivo de los faltejos. En la imagen se puede observar sin género de dudas uno de los principios que describió nuestro autor respecto a la evolución cognitiva de estos sujetos, a saber: “Al faltejo se le ve desde pequeño, por la cara y el entrecejo” (op.ct. pag. 387)



-    El medio-falto: se trata del sujeto lógico-operatorio alpha en la estructura jerárquica de los faltos. Hasta las aportaciones del Profesor Genaro Carrasqueras la taxonomía comúnmente aceptada situaba a esta tipología justo en el medio de los faltos –de ahí su nombre- pero fueron precisamente los estudios de campo del Profesor Ulpiano Zangüango, los que determinaron –conforme a la tradición científica manchega- que “el medio falto es aún más falto que el falto entero” (pags. 267 a 273 Op. Ct.). A pesar  de la nueva estructura taxonómica  propuesta por nuestro autor, éste consideró mantener el nombre del género conforme a la tradición anterior. Según Zangüango el rasgo definitorio del medio falto es que :“Es el más tonto de tos. Es rematao de tonto” (Ibid. 367) y propone una tipología conforme a su capacidad cognitiva, expresiva y de relación atributiva diamérica conforme al resto de sujetos lógicos operatorios con los que se relaciona, a saber:

-    El medio-falto (Subtipo A): Se erige en gurú de la tropa de faltos en el eje del campo antropológico circular de modo distributivo – no distingue entre faltos y faltejos- . Su ego y su ansia de ganar dinero le llevan a hacer el ridículo. Él es el único que sabe, él tiene la solución para todos los problemas de las truchas y los ríos y ve en la administración su peor enemigo. Suele habitar zonas montañosas y arrastra a un gran séquito de faltos a los que engatusa en comilonas y que le aplauden en las redes sociales.


Foto: (2001) foto tomada por el Profesor Hilario Culebras de la Universidad de Westfällensteinfen de un sujeto medio falto subtipo A, según la tipología establecida por el Profesor Zangüango. Instantánea tomada en plena comilona en la que el sujeto retratado hacía notar su hegemonía jerárquica frente a los faltos enteros, con una palo en una mano, un bote de cerveza en la otra y un inequívoco semblante de sujeto lógico-operatorio alpha.

-    El medio-falto (subtipo B): Es un gurú sobrevenido. Su aparición es tardía respecto al subtipo A. Su característica definitoria es su deficiencia cognitiva que se manifiesta en una verborrea sin el menor sentido, que atonta –aún más- a los faltos y faltejos que se acercan a él. Su discurso no posee sentido y carece de referencias –conforme a lo establecido por la Fª. Analítica de Russell yFrege-. Es capaz de concatenar hasta 2.500 vocablos incongruentes – se han descrito casos por el Profesor Zangüango de hasta 3.500. (Ibid. 433)- sin decir ni media, na más que soltando pantostás , a lo que los faltos que le siguen jalean y aplauden sin entender qué cojones ha querido decir. Su relación en el campo antropológico circular es, como ocurría en el caso del subtipo A, distributiva. Trata al resto de faltos de manera semejante y no siente predilección por ninguno de ellos en especial, pues siempre está dispuesto a soltar cualquier tontá sea quien sea en falto que tiene delante y le escucha. Habita zonas montañosas y suele ser poco viajero, alardeando de unos conocimientos que no tiene, ni por experiencia de la pesca en escenarios variados, ni por conocimientos teóricos, pues carece de ellos.


Foto: dos medio faltos. A la derecha un medio falto subtipo B en fase juvenil antes de la pérdida de cabello característica en individuos adultos. A la izquierda medio falto subtipo C, con su característica cara de bobo y sus inseparables gafas. Fotografía aparecida en la obra de nuestro autor “Los pescadores a mosca y las relaciones de poder entre sujetos lógico-operatorios en el eje circular del campo antropológico: tipología de los faltos” (Membrilla, 2001). La singularidad de la instantánea está en que ésta fue tomada justo antes de que ambos terminaran a hostias, como suele ocurrir, según la etología de los medio faltos de los tipos B y C descrita por el profesor Zangüango en la obra citada.
-    El medio-falto (subtipo C): su rostro suele denotar inmediatamente ante qué subtipo de medio-falto nos encontramos –(se le ve en la cara que es medio-falto). Ejerce un dominio de los faltos enteros y faltejos que le rodean apelando a la nobleza, y auna hipostasiada humildad de la que carece – por más que pretenda mostrar lo contrario-. Sus deficiencias cognitivas se manifiestan en un uso rebuscado y retorcido del lenguaje que pretende sea signo de cultura (algunos autores le han denominado “Garcinuño” por este rasgo tan característico. Ver R. Ründdingerhaer “¿Por qué los medio-faltos escriben como si del S.XVII se tratara?: claves para el estudio y comprensión de los medio-faltos (subtipo C) o Garcinuños”. Univ. PortwestAlcaudete, 1967), cuando lo que manifiesta de un modo diáfano es su absoluta estupidez. Respecto a la relaciones jerárquicas en el espacio antropológico circular, las relaciones que establecen con el resto de faltos son diversas respecto a los anteriores dos subtipos. Así, muestran unas relaciones atributivas diaméricas que pueden ser simétricas y a su vez verticales u horizontales, o asimétricas. Las relaciones atributivas simétricas se dan porque el resto de faltos ocupan una posición no meramente distributiva respecto al medio-falto, sino que hay algunos que son considerados por él “sus padawan”, a los que instruye en su hipostasiada sabiduría – son los faltejos- y el resto de faltos – los faltos enteros o faltos del tó- a los que tolera, siempre que le respeten – es decir, que le bailen el agua- . En cuanto a las relaciones atributivas  verticales, el medio-falto subtipo C, se coloca en un eje vertical respecto a otros a los que considera maestros y a los que hace la pelota y les dora la píldora sin saber muy bien porqué. Conforme a la clasificación propuesta por el Profesor Zangüango, también mantienen relaciones atributivas asimétricas cuando entran en contacto con otros medio-faltos – sobre todo del subtipo B-, lo que lleva a liarse a hostias con ellos y declarar una guerra abierta por quítame de ahí esas pajas.

Sin lugar a dudas este subtipo C, es el medio-falto más interesante para el estudio debido a los matices de su tontuna y hasta dónde es capaz de hacer llegar la estupidez de los pescadores a mosca, tal como lo ha reconocido en sus estudios el autor que nos ocupa.


En este punto damos por concluido este artículo de divulgación, esperando que haya resultado clarificador respecto de los trabajos del profesor Zangüango sobre las distintas tipologías de faltos en la pesca a mosca y emplazándoles a nuevas citas en este su espacio dedicado a la antropología social.

domingo, 13 de marzo de 2016

El hombre y el agua. Serie fauna ibérica. El Trilero de río

El Trilero de río (Caradurus horribilis)

Especie en clara explosión demográfica, el Trilero de río es un endemismo ibérico “typical spanish” de naturaleza claramente hematófaga (Petulanteus, 2000). Los orígenes del Caradurus horribilis parten de la evolución, a partir de mutaciones en ejemplares de especies con un interés por enriquecimiento rápido muy desarrollado, compartiendo filum con conocidos ectoparásitos, según demuestra la tesis doctoral del Decano Ascilo Max-Stuart de 1927, expuesta ante el tribunal del departamento de Etnoantropología de la Universidad de West Membrilla, Campus de Brazatortas que, como es sabido, es el origen de todas las investigaciones y trabajos en torno a las especies que habitan los espacios fluviales y lacustres tratadas en este blog. Sus posteriores cruces con otros taxones, con comportamientos similares a los de los hirudíneos, fueron generando seres evolucionados que, hasta nuestros días, han ido perfeccionando la pureza y morfología de la especie Caradurus hasta su definitiva taxonomía actual (Prof. Toprieto 2001), en la que mantienen como característica común de la especie el desplazamiento pasajero de sus presas.

A día de hoy, debido al reciente descubrimiento de  comportamientos claramente exterminadores, se le ha  englobado dentro de la categoría de súper-predadores (Petulanteus 2016, “Anexo II actualizado del Sistema Soplapollae”).

Es capaz de aglutinar en su comportamiento las cualidades más codiciosas de cada especie, siendo insensible a la confianza ajena, indiferente al engaño al prójimo, insaciable en su avaricia, audaz en el incremento de precios de sus servicios, altruista en elogios a lo inservible de su oferta, intolerante a los puntos de vista críticos, profeta de terruño con visión mundial y acaparador de la buena voluntad en forma de materiales de todo aquel que se le aproxime. Se caracteriza por su peculiar gruñido “¿Dónde está la bolita?”, emitido cuando está a punto de abalanzarse sobre sus presas.

No obstante, fruto de los cruces entre los diferentes taxones menos adaptados al medio, a lo largo del desarrollo y evolución de la especie, se han detectado ciertas degeneraciones en forma de ejemplares con una única neurona. Son fácilmente identificables por su comportamiento “borderline” y sus serios problemas comunicativos, tanto en forma oral como escrita, perpetrando con contumaz iteración agresiones al diccionario de la RAE. y al idioma en el que parece que se expresan (subespecie Faecinus que no trataremos en detalle por su escasa importancia).

De amplia distribución en toda la Península ibérica, se está convirtiendo en claro dominador de los ecosistemas terrestres, fluviales, marinos, lacustres, de edición impresa e incluso, recientemente, se han detectado nuevas poblaciones que están revolucionando los espacios virtuales (Prof. To-prieto 2012). Esta capacidad adaptativa de sus poblaciones no genera problemas de convivencia entre ellos, esto es debido a que sus territorios están claramente diferenciados. Fruto de esta territorialidad, se puede dar la circunstancia de que dos o más Trileros de río depreden sobre la misma víctima propiciatoria, dejándola literalmente en shock arterial (1).

Debido a sus limitaciones de movilidad en medios terrestres y acuáticos, en ocasiones sus capacidades predadoras están muy afectadas y, dado que se alimenta directamente por succión de todo aquel incauto que se le acerca, requiere que los ejemplares sobre los que depreda se encuentren muy próximos, las ferias son su territorio de caza preferido, arrinconando a las posibles presas contra el stand, pero tampoco desdeña un buen mailing para atraer incautos con los que poder llenarse la barriga.

Gracias a los exhaustivos estudios  (Z. Raposero et J. de Lomo en 2013) sobre las técnicas de caza del Trilero de río, el Dr. Raposero ha realizado una revisión de su ya referente “Memorándum de hábitos y comportamientos fluviales”. En futuras entradas de éste blog relacionadas con la Fauna Ibérica, se irán detallando capítulo a capítulo los pormenores más técnicos de tan completo documento. Recomiendo al lector no perder detalle de todo cuanto se encuentra allí recogido, que sin duda será de su interés.

Estudios posteriores a los del Dr. Raposero, concretamente los recogidos en la última actualización del ya referido “Sistema soplapollae” (Petulanteus, 2016), han identificado las siguientes subespecies:

Subespecie Antunus: Más antigua que la orilla del río, su descubrimiento data de 1956 fruto de los trabajos de campo del afamado Decano Ascilo Max-Stuart en la cuenca del río Tajo. Destaca por ser una subespecie con una altísima capacidad de innovación. Taimada, insensible y absolutamente insaciable a la hora de depredar sobre sus presas. De hecho, y a modo de anécdota, en las primeras anotaciones sobre la especie, el Decano Ascilo destaca que, por unos momentos su integridad física, y la de su cartera, llegó a correr peligro en las cantinas de las pedanías del alto Tajo.

Por puro empirismo, el Decano documentó que cada generación que se engendra es más eficaz en sus habilidades depredadoras que la anterior. De esta forma ha demostrado su capacidad de adaptación en otros continentes a los que migra de manera cuasi permanente, siendo igualmente tan  hábil en sus técnicas depredadoras como lo es en su territorio de origen.

Subespecie Pescatureus: Con varios años de existencia documentada, la actualización de Petulanteus 2016 ha sido el primer trabajo publicado en sacar a la palestra a este tremendo ejemplar del género Caradurus. Según el Sistema Soplapollae, habita en el noreste peninsular y sus técnicas de caza se encuentran altamente especializadas en espacios virtuales y el medio marino.

Suele reclamar la atención de sus víctimas con un enorme grado de ostentación, siempre con lo más grande de lo mejor. Desgraciadamente para sus presas, la realidad no guarda ninguna relación con la ostentación de lo ofertado, y cuando quieren darse cuenta del engaño ya es demasiado tarde.

Subespecie Salmoberdagii: También de reciente catalogación (Petulanteus 2016), se trata de un ejemplar sumamente peligroso pese a que su población es en la actualidad bastante reducida.

Destaca por ser el más evolucionado de todos los súper-predadores del género Caradurus. De hecho, los estudios de campo realizados destacan su innata habilidad para camuflar sus oscuras intenciones empleando la archiconocida técnica del tonto útil ya documentada por el Dr. Zacarias Raposero en 1988 en alguna de sus especies protogénicas. Generalmente, esta técnica se emplea en ambientes locales, sin embargo, la subespecie Salmoberdagii ha sido capaz de exportar esta técnica a regiones bien distantes de su área de influencia sin necesidad de realizar las migraciones de la subespecie Caradurus antunus.

La observación de la etología en campo de estos ejemplares ha llegado a descubrir su modo de comportamiento, en el que identifican mediante un detallado análisis a todos y cada uno de los individuos sobre los que puede depredar.  De entre todos selecciona a uno, con características que determinan un nivel intelectual similar al del género Amoeba, con objeto de ser fácilmente reconvertido. Una vez negado de voluntad propia y totalmente aleccionado, el incauto intermediario consigue acercar a sus presas reales a un espacio donde el Caradurus se mueve rápida y eficazmente sobre la cartera de la presa que, a la postre, es su zona más sensible y vulnerable. Es una técnica altamente efectiva, pese a que se han constatado  casos en los que alguna posible víctima ha visto el engaño y la trifulca entre víctima y hombre de paja ha terminado con funestos resultados para ambos, quedando el Caradurus Salmoberdagii al margen como un mero espectador.
  
Subespecie Claudiae: Sin ser una subespecie oficialmente definida hasta hace unos meses, queda pendiente su reconocimiento oficial según el dossier técnico  (Petulanteus 2016, Sistema Soplapollae). Se aventura como un subespecie bastante menos evolucionada que, debido a sus limitaciones, tiene sus pagos en los más inhóspitos y recónditos parajes de las estribaciones de la vertiente sur del Sistema Cantábrico.

Es capaz de sobrevivir depredando como todos los Trileros de río, atrayendo a sus víctimas  con la realización pequeñas tareas manuales de escasa cualificación. Aunque ha creado métodos de subsistencia con intervenciones en diferentes medios desde los que, en una paupérrima defensa del pescador tradicional, engatusa a sus víctimas para conseguir su proximidad e inmediatamente depredarlas. Suele tener grande dificultades para conseguirlo y es que lo suyo es una carrera de fondo. Es por esto que suele ser que a finales del invierno, cuando en los primeros días crecientes de marzo sale de su letargo, convoca a todas sus presas y se da el atracón del año a la puerta de su casa.

Dentro del ámbito de las hibridaciones o simbiosis, se han documentado acercamientos con el Gordo de río (Fat fluvius septentrionalis), e incluso se han observado mutaciones del genero Cipota al género Caradurus, si bien los estudios aún se encuentran en fase de desarrollo, lejos de llegar a ser considerados axiomas.

Para lograr la continuidad de los estudios, en un ejercicio de puro altruismo, el Mosquero Petulante en estos momentos está colaborando y ha creado una campaña de crowdfunding para continuar el desarrollo de  los trabajos de  los Doctores Raposero y  Sáenz de Minglanilla sobre esta especie de la que todavía no se tienen todos sus detalles sobre su comportamiento.

La especie Caradurus horribilis goza de una explosión demográfica sin precedentes, fruto de la cantidad de ingenuos que pululan por los medios fluviales, lacustres, terrestres, marítimos y virtuales. Si bien es cierto que se encuentran en una época de bonanza, no es menos cierto que los mayores expertos en materia poblacional como los doctores eméritos del Campus de Brazatortas aventuran un escenario complicado para la especie que puede acarrear inciertos resultados para su viabilidad.

Debido a su categoría de súper-predador y al lento crecimiento de la cartera de sus presas, se prevé un estancamiento poblacional a cinco años vista, lo que originará fuerte competencia intra-específica entre las diferentes subespecies del género Caradurus que consigan adaptarse.

En cualquier caso, actualmente tiene la catalogación “Sensible a la alteración del hábitat” en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN.

(1)    Nota del autor: En la ruina.

miércoles, 9 de marzo de 2016

Crónica de la 275ª muestra de pájaros pa’pelos “Claudio Montañero”. el Paj-harillo 2016.

 Pintona Pinturera la caza de fauna mosquera
Crónica de la 275ª muestra de pájaros pa’pelos “Claudio Montañero”. el Paj-harillo 2016.

Al más puro estilo día de la marmota, en versión findesemanal y muy ibérica, se celebró los pasados días 5 y 6 de marzo de 2016 la "275ª muestra de pájaros pa'pelos “Claudio Montañero” en la localidad norteña del Paj-harillo. Como corresponsal de este blog en tan magno evento, al que fuimos invitados con todos los gastos pagados por la organización, os expongo esta crónica para dejar constancia escrita de lo acontecido.

Sábado 5 de Marzo.
En una nave que bien valdría para guardar y refrigerar carne, se dieron cita ni más ni menos que 4 expositores, con los cuatro pelos y perdigones que pretendían vender (más o menos torcidos, más o menos bien hechos), pregonando las virtudes de los mismos como si de medievales maestros barberos se tratara.

Al son de las fanfarrias y acompañado de grandes aplausos y muestras de afecto, se anunció la llegada del gran Claudio, presentador, anfitrión, protagonista y principal espectador de la feria, con el alcalde de turno para dar paso a la ceremonia inaugural del evento.

Como cada año y de manera repetitiva y martilleante, a las 12:00, se proyectó para solaz y regocijo de los asistentes,  un video de la pesca en el afamado río Carreño, con Claudio Montañero como pescador protagonista exclusivo. La feria comenzó con unas emotivas palabras del mencionado anfitrión, que transcribo literalmente para poder reflejar todo el sentimiento y cariño que en el mismo se expresaron:

Haki tenemos hunas Vonitashimajenes del ryoKarreño, kepa truchas tienhunas pocas, pero llo las peskotoas y kyenbengakonmygopeskarakyen no benga se comera los mokos

Con agrado y gran acogida de todos los palmeros asistentes, Claudio continuó con su discurso contra “todiós”, que si mierda por aquí y mierda para allá; al término recibió una  unánime y cerrada ovación que no deja lugar a dudas de la escasa capacidad de convocatoria y liderazgo de este personaje y de la aceptación de su discurso por parte de un sector decadente y caduco de pescadores.

Tras desalojar del parking con pelotas de goma a los 300 vendedores clandestinos de hilachos y obligar a los asistentes a entrar, de nuevo Claudio procedió a la realización de una exhibición de arranque de pelos de pájaro en el stand de Fenici@,  esta vez su actuación recibió una ovación cerrada y se dejaron ver pañuelos agitados al viento como expresión de admiración, gratitud  y reconocimiento  de los palmeros asistentes.

El devenir de la mañana transcurrió entre risas y charlas de los visitantes fuera del recinto y el cuarto desalojo, esta vez con botes de humo, de los vendedores clandestinos de hilachos del parking.

La presentación del proyecto Fenici@, la revista Fenici@, así como sus logros por parte de Claudio, dio lugar a otra gran ovación de sus palmeros (ya con las palmas de las manos coloradas), dando paso a otro emotivo y repetitivo discurso que olía a río y trucha, si, olía sobre todo a trucha, literalmente, el olor de la sopa de truchas que se apretaron a continuación los comensales.

La tarde tuvo como principal acto la exhibición a cargo, como no, de Claudio,sobre montaje de perdigones en el stand de Fenici@, dónde fue obligatorio utilizar como cercos los famosos pelos de pájaro de la comarca. Tras el aplauso de los palmeros (esta vez más atenuado porque alguno mostraba ya signos de dolor en las manos), se dieron cita montadores venidos de los cuatro puntos cardinales (de más o menos 15 km a la redonda), para el famoso concurso de montaje de perdigones.

Tras el concurso y con el décimo desalojo, esta vez con tractores desde los que se lanzaban chorros de agua a presión,  de los vendedores clandestinos de hilachos del parking, se dio por concluida la jornada con el cierre del recinto.

Domingo 6 de Marzo.
A las 10 de la mañana y una vez abiertas las puertas del gélido pabellón de exposiciones,  para que entrara algo de calor de fuera, los visitantes mejor abrigados volvieron a entrar para ver de nuevo los cuatro expositores.

Inmediatamente comenzó la famosa exhibición de carreras de escarabajos peloteros endémicos de la comarca, a cargo del club de escarabajos peloteros del Paj-harillo, que no era de relleno, no, que este acontecimiento una vez salió en las noticias de Pedro Piqueras.

El vigésimo desalojo de vendedores clandestinos de hilachos del parking, tuvo un fatal desenlace, con un herido por pelotazo de goma, un tipo con barbas de Gandalf y con un jersey de punto gordo hecho con lana de yak que entre salivajos y mala palabrería fue desalojado en ambulancia.

Tras la décima exhibición de Claudio de arranque de pelos de pájaro en el stand de Fenici@, con el consecuente aplauso de los palmeros asistentes (unos palmeros de fe inquebrantable a los que las manos siempre les responden), tuvo lugar el acto de clausura con otro emotivo discurso de Claudio, quien entre pobres jubilados, pobres productores de pelos, pobres habitantes de la comarca, se proclamó salvador de todos ellos y en el que les transmitió que gracias al proyecto Fenici@ no serían menos pobres, pero si más felices.

Quiero dar las gracias desde esta tribuna a la organización por haberme invitado a la MUESTRA DE PÁJAROS PA’PELOS “CLAUDIO MONTAÑERO”, que cada año se renueva haciendo siempre lo mismo, fomentando de esta forma su carácter testimonial para que cada vez se parezca más a una reunión de amigos dedicados al llantar de buenas viandas y al libar de los caldos de la tierra que tanto agradezco.

domingo, 6 de marzo de 2016

El hombre y el agua. Serie fauna ibérica. El Pisamangueras común

El Pisamangueras común (Cabrofluvius egoparatusquamvos)

Una especie que nació en los albores  de la pesca con caña, aunque se duda que ya existiese antes de la misma (Sistema soplapollae, Petulanteus 2003), el Pisamangueras  común es una especie intrusiva que no goza de buena reputación entre los naturalistas y mucho menos entre los pescadores modernos.

De amplia distribución en toda la Península ibérica, encuentra sus mayores poblaciones en las zonas norte y centro. Mantiene poblaciones asentadas en muchos ríos salmoneros de la Cornisa cantábrica como Narcea, Nalón, Nansa y Sella, así como en pequeños ríos de la cuenca del Tajo, en gran parte de la del Duero y los principales afluentes pirenaicos del Ebro, es una especie oportunista que ha conseguido desplazar a un gran conjunto de autóctonas dada su gran voracidad predadora.

Una particularidad destacada de su etología es que no es una criatura que se alimente para subsistir (Prof. Saénz de Minglanilla 2005), sino que preda sobre sus víctimas por mero entretenimiento o simplemente por el hecho de acechar (Prof. Toprieto 2006). Generalmente es casi incapaz de capturar nada motu propio, pero destaca como un hábil levantador de presas ajenas.

Gusta de ser criatura discreta y pasar desapercibida, dado que su supervivencia en el medio  fluvial pasa por un total  camuflaje que le permita acercarse a sus víctimas. Sus técnicas de caza han sido ampliamente estudiadas por los más eruditos y prestigiosos investigadores de las pocas universidades que mantienen abiertos sus departamentos de Antropología Cultural (Z. Raposero et J. de Lomo, 2004).

Fruto de estos estudios, se han identificado dos formas principales de ataque, comunes en su predación de otras especies.  A pie de río, el aficionado puede identificar claramente al Pisamangueras común si observa sus malas artes:

Su técnica primaria consiste en remolonear con cierto disimulo las mejores zonas de las pozas de los cursos fluviales. No tantea ni marca territorio, simplemente espera. En el momento en que su víctima se encuentra a distancia de alcance, lanza un rápido ataque frontal que invade el espacio vital de las especies pasto que irremediablemente  han de buscar alimentación en peores cazaderos.

Su técnica secundaria, fruto de una evolución de la anterior, consiste en ir de frente a por la víctima con buenas palabras y consejos, pero se trata de un ardid. La oscura intención que se oculta detrás de este comportamiento es mucho más siniestra ya que, tras establecer un clima de confianza, asegura que él se irá a unas pozas de ahí abajo para dejar al incauto varios kilometros de río. Una vez establecida la trampa, la culmina con un pequeño paseo aguas abajo para, tras malpescar estas zonas inferiores, ascender inmediatamente aguas arriba a esperar a su víctima a la vuelta del primer recodo.
Éstas técnicas han sido recogidas pormenorizadamente en los trabajos del Profesor Raposero, dentro del “Memorandum de hábitos y comportamientos fluviales” que será publicado en un futuro dentro de este mismo espacio.

Estudios anteriores a los del Prof. Raposero, concretamente en el “Systema soplapollae” (Petulanteus, 2003), han identificado tres subespecies:

Subespecie Clamorii. Descubierta en 2001 dentro del Tormes salmantino (Petulanteus 2001) la especie desapareció hasta que en 2013 se han vuelto a ver de nuevo ejemplares en este río, se ha datado genéticamente que no es autóctono en esta cuenca. Desplaza a los endemismos locales a “grito pelao” limitando severamente sus capacidades auditivas, incapacitando por desidia para la pesca a todo aquél que se encuentra dentro de su rango de acción acústica.

Subespecie Mediumtempus. Habitante autóctono de la Cornisa cantábrica desde que se inventaron los nudos, destaca por su capacidad adaptativa a cualquier situación. Si la acción le favorece, no duda en predar sobre cualquier especie menos adaptada. Ahora bien, si cualquier otro Pisamangueras trata de ocupar su espacio vital no duda en recurrir al medio tiempo, llegando incluso a la agresión física para repeler el ataque.

Subespecie Protorus. Descubierto recientemente en el Tajuña (Z. Raposero et J. de Lomo, 2014), destaca por ser el máximo exponente de la segunda técnica de caza del Pisamangueras (“Sube y baja”) recogida en el Memorandum. Actualmente en estudio, se desconoce el tamaño real de su población debido a la velocidad con la que sus ejemplares se mueven por las riveras. Tras varios intentos infructuosos, se ha determinado que sólo con un mapa genético se podrá conocer exactamente su tamaño.Aunque actualmente los estudios avanzan a buen paso, existen voces discrepantes a los mismos  como el Profesor Saénz de Minglanilla que determinan que la población del Tajuña es de únicamente un ejemplar.

Pese a estar documentada la existencia del Pisamangueras desde hace años, se desconocen sus estrategias reproductivas, aunque se cree que están profundamente relacionadas con la densidad de los peces del tramo que habita y el tamaño de los mismos.  A mayor escasez y tamaño de los peces, las poblaciones se disparan, llegando a generar problemas de convivencia.

Se han identificado cuellos de botella que pueden hacer peligrar la viabilidad de la especie en un futuro, dada su facilidad para hibridar con otras especies y la consiguiente pérdida de pureza genética. Han aparecido en aquellos tramos donde también abunda el Fantasma de río y, aunque todavía está en fase de estudio, se han datado ejemplares híbridos provenientes de estas dos especies en los que se descubre las cualidades más denigrantes que puede poseer cualquiera de las especies que habitan nuestros cauces y riberas. También se tiene constancia por testimonios directos, por lo menos de un caso, de hibridación con el Cacho de boca grande que, durante alguna de sus migraciones, se destacaba por levantar las presas a los que le sufragaron el desplazamiento.

No tienen un ciclo marcado, ni un cortejo definido, y se ha documentado que su explosión demográfica  guarda paralelismos con la generación espontánea. En cualquier caso, no es una especie sensible a la alteración del hábitat, pero dado que se cataloga en el grupo de alimañas oportunistas y se desenvuelve en cualquier medio acuático natural o artificial, no tiene catalogación en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN.